jueves, 12 de noviembre de 2009

ESA MAGIA

Que fue de las soledades a cuatro esquinas,
Dime, y que fue de esas conversaciones a solas,
De esos largos paseos junto al mar,
De esa charlas privadas con el más Poderoso.
-Quizás los años me enseñaron a distinguir lo bueno de la vida
Sin darle tanta importancia, a todo aquello a lo que puedo comprar,
Tal vez, mirar hacia arriba y admirar la copa de un árbol intacto,
Poniéndote a imaginar cuanto necesito hasta llegar a esa altura.
También sentándome a la orilla del mar, admirando tanta perfección y a lo lejos,
un horizonte donde se junta dos cosas enormes en un solo punto,
el firmamento y el mar, piensas que ahí se acaba y si, para tus ojos…
Pero sigue navegando, te perderás en esas aguas a las que adoras… Y temes.
Paseando por el campo y admirando una simple flor silvestre y piensas como llego hasta ahí sin que nadie la sembrara.
Esa emanación de agua de las entrañas de la tierra de la cual subsistimos,
Y tu solo piensas, que bien , agua fresca y clara …
Y no te paras a pensar que esta puesta ahí para ti.
Te pierdes de admirar la creación de DIOS , todo, todo hasta lo mas insignificante es inmenso...

1 comentario:

  1. Sin duda, todo lo que la mirada alcanza a mirar, es el regalo que de Dios nos viene y no apreciarla, es perderse la inmensidad divina.
    Gracias Chely por tus reflexivas palabras.
    Besos mil
    Lu

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